Los residentes de Arnage, un pequeño pueblo en el norte de Francia, tienen muchos camiones entrando a las estrechas calles de las áreas residenciales. Los camioneros explican que son guiados por el GPS. Tal vez una señal adicional resolverá el problema con la navegación.
En Arnage, ubicado en el departamento de Sarthe, en la región de Pays de la Loire, los residentes locales se reunieron últimamente con el alcalde para decidir cómo evitar el ingreso habitual de camiones a áreas residenciales, informa el servicio local Le Maine Libre. Como dicen los residentes de Arnage, sucede casi todos los días. Estas situaciones son agobiantes tanto para los residentes como para los camioneros que tienen problemas para maniobrar en calles estrechas.
Muchos camiones se dirigen a Bolloré, una empresa internacional de transporte y logística, ubicada al norte de Arnage. Para llegar al destino, los vehículos, conducidos por GPS, entran en la calle des Acacias (ruta roja en el mapa), en lugar de Boulevard Lefaucheux (ruta verde). La calle des Acacias no se adapta al tráfico de vehículos pesados. Los residentes están preocupados por sus automóviles, así como por el deterioro de la superficie.
La idea de las autoridades
Boulevard Lefaucheux es la principal carretera de entrada a Bolloré durante varios años. No está claro por qué el GPS todavía conduce a los conductores a calles más pequeñas. La ciudad intentó llegar a un acuerdo con la empresa para resolver el problema, pero fue en vano. Se decidió colocar un letrero grande con flechas que indicaran la dirección correcta a la salida de las instalaciones de la empresa. Antes de que esto suceda, si se encuentran en esta área, tengan cuidado con las indicaciones del GPS: pueden causarle problemas.
Fot. Renault
