Los hechos ocurrieron la madrugada del 5 de noviembre, alrededor de las 01:40 horas, cuando una patrulla de los Mossos d’Esquadra que realizaba tareas de prevención en la autopista AP-7 fue alertada de posibles robos en el área de descanso del Mèdol, a la altura del kilómetro 237. Al llegar al lugar, los agentes observaron a dos hombres huyendo a pie del aparcamiento, que intentaron esconderse fuera del perímetro de la zona de servicio. Tras una breve persecución, los policías lograron interceptarlos. Sin embargo, los sospechosos opusieron una fuerte resistencia y agredieron a los agentes en su intento de escapar. Una segunda patrulla acudió en apoyo, consiguiendo finalmente detenerlos.
Daños en 17 camiones
Durante la inspección posterior, los Mossos constataron daños en un total de 17 camiones, de los cuales ocho estaban en el área de descanso en sentido norte y nueve en sentido sur. Las lonas de los vehículos habían sido rajadas, aunque no se llegó a sustraer ninguna mercancía. Los dos detenidos, de 34 y 44 años, están acusados de 17 delitos de robo en grado de tentativa, además de delitos de daños, lesiones, resistencia y desobediencia a la autoridad.
Posible tercer implicado
La investigación sigue abierta y no se descarta la participación de un tercer individuo que habría huido del lugar en un vehículo a gran velocidad. Uno de los arrestados cuenta con siete antecedentes por delitos de robo y será puesto a disposición del juzgado de instrucción en funciones de guardia de Tarragona.
Preocupación en el sector del transporte
Aunque en este caso no se sustrajeron mercancías, el suceso vuelve a poner sobre la mesa la vulnerabilidad de las áreas de descanso en las principales rutas logísticas españolas como la AP-7. Transportistas y asociaciones del sector reclaman mayores medidas de seguridad para evitar ataques similares, que pueden causar importantes pérdidas económicas y poner en riesgo la integridad de los conductores. Este intento frustrado de robo refuerza la necesidad de mejorar la vigilancia y protección de los aparcamientos de camiones, una demanda cada vez más urgente en un contexto de creciente criminalidad contra el transporte de mercancías.



