La reforma, aprobada por los ministros de transporte de la UE, moderniza completamente el sistema de inspecciones técnicas del bloque. El objetivo oficial: mejorar la seguridad vial, detectar a los “grandes emisores” y adaptar la aplicación de las normas a las tecnologías actuales. En la práctica, significará más controles para camiones y furgonetas en toda Europa.
Un paquete legislativo que transformará el control técnico en la UE
El acuerdo, adoptado el 4 de diciembre de 2025, establece la posición del Consejo de la UE para las negociaciones con el Parlamento Europeo. La revisión afecta a tres áreas clave:
- ITP – inspecciones técnicas periódicas,
- RSI – inspecciones en carretera,
- y los documentos de registro de vehículos, que serán completamente digitalizados.
La versión final de la ley aún puede cambiar durante el trílogo, pero la dirección política ya está marcada: más control, más tecnología y menos margen para incumplimientos técnicos.
La sujeción de la carga: un punto obligatorio en cada control en carretera
La seguridad de la carga pasa a ocupar un lugar central en la Directiva RSI revisada.
Según el Consejo, la sujeción de la carga es un elemento “crucial para la seguridad vial”, por lo que a partir de ahora una evaluación visual se convertirá en una parte estándar de cada control inicial de carretera en toda la UE.
Durante cada RSI inicial, los inspectores deberán:
- verificar el último certificado de ITP,
- evaluar visualmente el estado técnico del vehículo,
- y examinar cómo ha sido asegurada la carga.
Si hay dudas, el vehículo será sometido a una inspección más detallada basada en el nuevo Artículo 13, que remite al Anexo III. Allí se especifica que la carga no puede comprometer la conducción segura ni representar riesgo alguno —ni siquiera en maniobras bruscas o arranques en pendiente.
Esto significa que una obligación ya existente pasa ahora a ser verificada de forma explícita, uniforme y sistemática en todos los Estados miembro.
Más inspecciones en carretera para camiones y furgonetas
La UE quiere garantizar un mínimo de controles para toda la flota de transporte pesado.
Cada Estado miembro deberá realizar controles en carretera iniciales por un volumen equivalente al 5 proc. de todos los vehículos comerciales pesados registrados. Esto incluye camiones N2 y N3, así como remolques O3 y O4.
Para las furgonetas N1, el volumen de inspecciones iniciales debe ser igual al 10 proc. del número de controles efectuados a vehículos pesados. Las furgonetas podrán quedar exentas de RSI si ya están sujetas a ITP anual a partir del segundo año.
Además, se refuerza la selección basada en el riesgo: las empresas con historial de deficiencias técnicas serán inspeccionadas con mayor frecuencia, lo que puede intensificar la presión sobre operadores con flotas más antiguas.
Pruebas de emisiones más exigentes: partículas, NOx y sistemas más precisos
Una de las reformas más significativas afecta a las pruebas de emisiones.
La Comisión Europea señala que las actuales ITP y RSI no detectan suficientemente a los vehículos con altas emisiones, especialmente en lo relativo a NOx y partículas.
Los nuevos anexos introducen:
- Pruebas de número de partículas (NP) para vehículos diésel y gasolina
- Mediciones de NOx para motores gasolina y diésel
La Comisión establecerá los métodos exactos y los valores límite mediante actos de ejecución. Las estaciones de inspección deberán estar preparadas para aplicar estas pruebas en un plazo de 4 años.
Esto implica que los transportistas afrontarán controles de escape más avanzados y sensibles tanto en la inspección periódica como en controles en carretera.
Sensado remoto: un nuevo instrumento para detectar a los “grandes emisores”
La tecnología de sensado remoto, ya utilizada en algunos países europeos, recibe un reconocimiento formal dentro del sistema.
Aunque la propuesta inicial de la Comisión preveía que los Estados miembros debían emplearla para al menos el 30 proc. de su flota, el Consejo ha convertido esta obligación en opcional.
Los Estados podrán usar sensado remoto para:
- identificar vehículos con posibles emisiones excesivas,
- seleccionarlos para RSI,
- o convocarlos a un centro de ITP.
Los resultados del sensado remoto no podrán utilizarse como base para declarar a un vehículo no apto, pero sí como herramienta de detección preliminar. La Comisión fijará metodologías comunes una vez que se recopile suficiente información.
En la práctica, los transportistas podrán recibir notificaciones para presentar un vehículo a examen tras haber sido detectado por sensores instalados en carreteras o puentes.
Certificados de ITP digitales: adiós al papel, hola a los QR
La reforma también marca un paso decisivo hacia la digitalización total.
Los certificados de idoneidad serán plenamente digitales, con contenido armonizado y códigos QR para verificar su autenticidad. Estos sustituirán progresivamente a los documentos en papel.
Durante los controles en carretera, los conductores podrán presentar:
- certificados de ITP en formato electrónico,
- así como informes de RSI digitales.
La Comisión subraya que esto facilitará el intercambio de datos transfronterizos y reducirá la carga administrativa, especialmente para el transporte internacional.
¿Qué sigue en el proceso legislativo?
El “enfoque general” adoptado por el Consejo será la base para las negociaciones con el Parlamento Europeo. Solo después de alcanzar un texto común, las nuevas normas se convertirán en obligatorias.
¿Qué significa para los transportistas?
Si las normas se aprueban en la forma actual, los operadores deberán prepararse para:
- más inspecciones en carretera para camiones,
- controles obligatorios de sujeción de la carga,
- pruebas de emisiones más avanzadas en ITP y RSI,
- posible sensado remoto de emisiones,
- y documentación técnica totalmente digital.
Los expertos del sector advierten que esto supondrá más tiempo en carretera para controles, más inversiones en mantenimiento y una vigilancia más estrecha de las flotas, especialmente de las más antiguas.









