El control tuvo lugar en la salida Neuruppin de la autopista A24, donde la policía interceptó a un camionero que viajaba desde Hungría hacia Meyenburg. Muy pronto quedó claro que el conductor apenas había abandonado el asiento durante un largo periodo —y de forma casi literal.
Más de 30 horas sin un descanso real
Según los hallazgos de los agentes, el conductor húngaro había permanecido al volante más de 30 horas con apenas pausas significativas. Se trata de una infracción flagrante de la normativa, que establece que los conductores de camiones pueden conducir un máximo de 10 horas al día. En este caso, las pausas obligatorias prácticamente no existieron, informa el medio alemán Nordkurier.
La policía prohibió de inmediato continuar el trayecto y ordenó al conductor realizar un descanso mínimo de 11 horas. Además, subrayaron que no era la primera vez en las últimas semanas que el mismo camionero era sospechoso de cometer infracciones graves relacionadas con los tiempos de trabajo.
Una multa que asciende a 40 000 euros
El caso no terminó con una simple advertencia. Tanto el conductor como la empresa para la que trabajaba deberán enfrentar consecuencias financieras considerables. La policía impuso 20 000 euros de multa al empleador y otros 20 000 euros al propio conductor. El importe refleja no solo la conducción continua registrada durante esta intervención, sino también otras violaciones cometidas en los dos últimos meses.
Las autoridades recalcan que controles como este seguirán intensificándose, especialmente ante comportamientos que ponen en riesgo tanto la seguridad del conductor como la de otros usuarios de la vía.








