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Vinci Autoroutes ha entrado en la fase final de su proyecto «Charge as you drive», una prueba de carga dinámica inalámbrica para vehículos eléctricos en la autopista A10, cerca de Angervilliers, en Essonne (Francia). La iniciativa consiste en la instalación de bobinas de inducción bajo la calzada, lo que permitirá a los vehículos eléctricos cargarse cuando están en movimiento. El sistema funciona colocando bobinas transmisoras bajo la calzada, que generan un campo electromagnético. Los vehículos equipados con bobinas receptoras pueden convertir esta energía en electricidad, alimentar sus motores y recargar sus baterías.
El proyecto pretende evaluar la viabilidad de reducir el tamaño de las baterías, aumentar la autonomía de los vehículos y reducir los tiempos de carga.
El experimento se está llevando a cabo en un tramo de 1,5 km de la autopista A10 en Essonne. Desde enero de 2025, Vinci Autoroutes está instalando bobinas de inducción bajo el carril derecho, habitualmente utilizado por los vehículos pesados. Está previsto que el proceso de instalación continúe hasta abril de 2025, tras lo cual se realizarán pruebas con vehículos en condiciones de tráfico reales.
Una vez finalizada la instalación, se probarán en la A10 cuatro prototipos de vehículos (un camión, un utilitario, un turismo y un autobús). Si tiene éxito, este ensayo podría contribuir a un despliegue más amplio de la carga inductiva dinámica en toda la red de autopistas.
El proyecto está dirigido por Vinci Autoroutes, uno de los operadores franceses de autopistas, en colaboración con un consorcio de socios. Forma parte de un esfuerzo más amplio por desarrollar soluciones de transporte sostenible y descarbonizar el transporte de mercancías y la logística por carretera.
Alternativa a las estaciones de carga fijas
La iniciativa pretende reducir la dependencia de las grandes baterías de los vehículos eléctricos, que requieren grandes cantidades de litio, níquel y cobalto. Al permitir que los vehículos se carguen mientras están en movimiento, la tecnología podría reducir los costes de las baterías, ampliar la autonomía de conducción y reducir el tiempo de inactividad por recarga. El sector del transporte representa actualmente un tercio de las emisiones de gases de efecto invernadero, y Vinci Autoroutes ve en la carga inductiva una alternativa potencial a las estaciones de carga fijas.
Este proyecto es uno de varios ensayos mundiales de carga inductiva, con pruebas similares en curso en Israel, Alemania, Italia y Suecia.